soñé que tenía caspa y vivía en una ciudad muy grande. en la ciudad muy grande todo estaba ordenado.
la población se dividía en castas. era todo más o menos previsible y ominoso.
en el centro de la ciudad no había nada. ir al centro era ir a un páramo.
los que leían, leían novelas de ciencia ficción o no leían nada.
al final del sueño yo llegaba al páramo buscando a un chico que me encantaba. él ni me miraba, además pertenecía a otra casta. entonces me ponía a buscar el centro del páramo. en un momento me pareció encontrarlo. me puse a dar vueltas en torno de mi propio cuerpo como un perrito que se busca la cola. quería recostarme y morir.
me recostaba. pero no me moría y entonces me daba cuenta de que no podía elegir cuándo me iba a morir por más que eligiera el lugar en el que me quería morir. me sentí tarada y dramática. ahí creo que me desperté. si este sueño fuera un invento hubiera agregado que, mientras estaba acostada esperando la muerte, un pterodáctilo surcó el cielo.